La Semana Santa es una de las celebraciones más arraigadas en la cultura española, marcada por una combinación de tradiciones religiosas, culturales y sociales que cautivan a los españoles. Y a millones de personas de otros países que acuden a conocerlas cada año.
Y si hay algo que nos gusta a los españoles es disfrutar del momento, uniendo la mejor compañía con los placeres gastronómicos. Por eso en Santagloria, dado nuestro origen artesano y nuestra pasión por la tradición culinaria, ponemos todo el cariño en elaborar algunos de los dulces más típicos de estas fechas, adaptándonos a las costumbres locales con productos de temporada.
Como cada año tenemos preparado un arsenal de especialidades propias de estas fiestas.
Empezamos por Cataluña, dada nuestra mayor implementación en esta comunidad.
Coca de Llardons
Un producto típico del pirineo catalán elaborado con huevos, azúcar, harina, piñones y chicharrones (llardons, en catalán). Históricamente, este plato se comía a partir del jueves graso, último jueves antes de Cuaresma y ayudaba a encarar el período de ayuno propio de esta época. En Santagloria las preparamos con respeto a la tradición y como siempre, con los mejores ingredientes.
Buñuelos de l'Empordà
Otro de los dulces típicos catalanes que empiezan a degustarse en Cuaresma pero que tienen su momento culminante al celebrar la Semana Santa. Para su elaboración contamos con un buen número de ingredientes. Toma nota: huevos, harina, agua, leche, levadura de París, sal, anís, grasa de cerdo, limón, y aceite o mantequilla.
Su forma habitual es como la de una esfera aplastada y su textura es densa y compacta. Algunas de sus características diferenciales es su ligero gusto a anís y que no tienen agujero.
Mona Cristina
La más conocida y tradicional de las monas de Pascua. Aunque sus orígenes documentados se remontan al siglo XV, la mona actual comienza a hacerse en el siglo XIX. Sus ingredientes son masa de brioche, mantequilla y chocolate. Originalmente se adornaba con huevos duros pintados, como símbolo de fertilidad y posteriormente con figuras de chocolate, fruta confitada y plumas. La tradición marca que es el padrino el que regala la mona a su ahijado con tantos huevos como años tenga el niño, hasta un máximo de doce.
Además de los dulces de Pascua típicamente mediterráneos, en Santagloria también ponemos todo nuestro saber artesano para elaborar otras delicias muy apreciadas en toda nuestra geografía.
Torrijas
Probablemente, el dulce más típico de estas fiestas en toda España. Una rebanada de pan de varios días, empapada en leche, almíbar o vino, que tras ser rebozada en huevo se fríe en aceite caliente. Finalmente se endulza con azúcar y es aromatizada con canela. Aunque hay ya antecedentes desde la antigua Roma, la primera documentación encontrada sobre el término ‘torrija’ en nuestro país data del siglo XV. La torrija nació como aprovechamiento del pan que no había sido consumido y con el paso de los siglos su popularidad se ha extendido por cada rincón de España. Como no podía ser de otra manera, en Santagloria honramos también esta tradición culinaria cuaresmal poniendo todo nuestro saber artesano para conseguir que quien la pruebe disfrute de un momento de gloria.
Huevos de Pascua
Desde la antigüedad, los huevos han sido un símbolo de fertilidad y también de comienzo de un nuevo ciclo. Su forma ovalada, que simboliza el infinito, representa el renacimiento y la regeneración del ciclo de la vida. Entre los siglos IX y XVIII, la Iglesia prohibió el consumo de huevos durante la Cuaresma por considerarlos equivalentes a la carne, y por ello la gente los cocía y los pintaba para diferenciarlos de los frescos y poder consumirlos el día de Pascua de Resurrección. Con la llegada del cacao, los huevos empezaron a rellenarse de chocolate. Hoy, muchos siglos después, siguen siendo una tradición de Pascua en medio mundo y en Santagloria los elaboramos con nuestro mejor chocolate y el mimo que le ponemos a todo.
Buñuelos de Viento
Pequeñas bolas de masa, de origen sefardí, elaboradas con harina de trigo, manteca y huevos, fritas en aceite caliente. Al freírse la masa puede llegar a duplicar su volumen y por eso les llamamos de viento, o sea, hinchados. Además de en Semana Santa son muy populares en Todos los Santos. En Santagloria los ofrecemos, además de en su versión más tradicional, rellenos de deliciosas crema, nata y trufa.
Como queda demostrado, en Santagloria nos encantan los dulces de Pascua y, sobre todo, poder conquistar el paladar de nuestros clientes otorgándoles un momento glorioso sea cual sea la época del año.